Escándalo en el Mundial de Esgrima entre una competidora ucraniana y una rusa
Tras la victoria de la participante de Ucrania ante su rival de Rusia, la atleta se negó a darle el saludo debido y la apuntó con la espada como parte de protesta al conflicto bélico entre ambas naciones.
Por primera vez desde que se desató el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, se enfrentaron dos deportistas de aquellos países en una disciplina olímpica no profesional como el Mundial de Esgrima, que se desarrolla en Milán, Italia.
La ucraniana Olga Kharlan, de 32 años, y múltiple campeona olímpica y del mundo, se enfrentó a la rusa Anna Smirnova, venciéndola sin mayores inconvenientes.
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Sin embargo, lo sorprendente llegó al final del duelo cuando Kharlan se negó a estrecharle la mano a su rival. Esta acción, según el reglamento, es penada con tarjeta negra, lo cual equivale a la descalificación y suspensión de dos meses.
En ese momento, la atleta rusa se niega a abandonar la pista y reclama la eliminación de su oponente. Todo esto mientras los árbitros se reunían en la cúpula de la Federación Internacional de Esgrima (FIE) y decidían sobre el incumplimiento de la ucraniana con la normativa.
Lo insólito es que mientras Smirnova permanecía sentada dentro de la pista, otros duelos del Mundial debían realizarse en ese mismo escenario. Ante la negativa de retirarse por parte de la rusa, la organización se vio obligada a retrasar los duelos siguientes por más de 30 minutos.
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Asimismo, los jueces decidieron no sancionar a Kharlan, lo que provocó la reacción inmediata de Smirnova: la rusa continuó impidiendo el desarrollo del certamen, incluso el duelo entre la propia Kharlan y la búlgara Ilieva.
Finalmente, los árbitros tomaron la decisión de descalificar tanto a la ucraniana como a la rusa Smirnova del torneo, quedando ambas fuera del Mundial de Esgrima.
